Las gotas de sudor son visibles en su frente, sus manos con una agilidad notoria dan forma a los panes. Ángel Angulo tiene su negocio junto al Parque Central y en los últimos tiempos ha sido víctima por varias ocasiones de los delincuentes. Felicito por la obra, pero se olvidaron del control de la prostitución, venta de droga y presencia de los ladrones, puntualizó.
“La semana pasada me tumban la puerta trasera… andan bandas aquí; a los policías se los ve andando en las patrullas, para tomar con las hembras sí… ahora tienen todo para defender a la ciudadanía…”, falta espíritu o sanción, boten 5 o 10 policías y verá como esto mejora, consideró éste artesano quien exige mayor prolijidad en el trabajo de los gendarmes.
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