Esa fue la exigencia de niñas, niños, padres de familia y profesores de la Escuela Enrique Castillo ubicada en el Barrio Paraíso Amazónico de la ciudad de El Coca, ante la violación y muerte de una estudiante de dicho centro educativo de apenas doce años.
Lágrimas, dolor, impotencia y rabia por lo acontecido, fue la tónica de quienes asistieron al sepelio de la infortunada niña, cuyos sueños y esperanzas la truncaron él o los responsables de éste repudiable crimen que engrosa la lista de mujeres que mueren víctima de la violencia machista.
Las y los manifestantes también enfilaron su rechazo por las presuntas aseveraciones del Jefe Político del Cantón, Freddy Rivera, quien les habría increpado por “utilizar a los niños en esta marcha”.
Este nuevo caso de feminicidio se suma al ocurrido hace casi un mes y que costó la vida de la propietaria del Bar Madera Fina. Organizaciones sociales están en vigilia para que se encuentre a los responsables y paguen por sus crímenes. NOTICIERO LATITUD CERO
 
             
		









