Son remotas las posibilidades que la provincia pueda verse afectada, en algún momento, por la caída de ceniza del volcán Tungurahua, aunque por el influjo de las corrientes de aire nada se descarta, como ya ocurrió en Pastaza, refirió Gerardo Espín de la Secretaria Provincial de Gestión de Riesgos.
El monitoreo del coloso es permanente, estamos listos para una respuesta inmediata en caso de ser necesario. No olvidemos que los riesgos inminentes en la zona son las crecidas de los ríos y deslaves, aunque eso no resta el accionar ante una eventualidad, incluso porque el Reventador también está en actividad, por eso tenemos en stock guantes, mascarillas y otros materiales, acotó Espín. NOTICIERO LATITUD CERO










